¡Un lugar misterioso en Takashima, Shiga! La leyenda de los «Jindai Moji» y de la chica de fuerza prodigiosa que alberga el Ankan Jinja.

En Azumigawa-cho Miosato, Takashima-shi, prefectura de Shiga, en el lado oeste del lago Biwa, se extiende un apacible paisaje rural. En este lugar se encuentra un pequeño santuario Shinto que atrae la atención secreta de los amantes de la historia y los entusiastas del misterio: el Ankan jinja.

Aunque a primera vista parece el santuario guardián de un pueblo, dentro de sus terrenos se esconden numerosos «misterios» que ni la ciencia moderna ni la historia han logrado desentrañar por completo. Hoy, les presentaremos algunos de los extraños episodios relacionados con este jinja.

Información básica

Ubicación: Shiga-ken, Takashima-shi, Azumigawa-cho Miosato 362-2
Kami principal: Emperador Ankan (Ankan Tenno)
Historia: La fecha de su fundación es desconocida. Se dice que esta tierra es el lugar de nacimiento del 26º Emperador Keitai, y el Emperador Ankan fue su primer hijo.

Misterio 1: ¿Indescifrable? El enigmático «Monumento de Jindai Moji»

Lo más llamativo en los terrenos del Ankan jinja es el «Monumento de Jindai Moji» (Jindai Moji hi), que se erige frente al edificio principal. Esta gigantesca roca, de aproximadamente 1 metro de alto y 1.4 metros de ancho, está grabada con extrañas imágenes que combinan espirales, líneas rectas y círculos.

¿Escritura de la antigüedad remota, o algo más?
Se ha dicho que esta inscripción es un tipo de «Jindai Moji», una escritura que supuestamente se usaba en Japón antes de la llegada de los caracteres chinos (kanji). Existe una teoría, especialmente, que afirma que se asemeja a los símbolos registrados en el antiguo documento «Hotsuma Tsutae», y entre algunos aficionados se le considera un «mensaje ancestral» y se le venera como un lugar sagrado.

¡¿Hasta hace unas décadas era un «puente»?!
Sorprendentemente, hay una historia poco conocida de que este valioso monumento de piedra se usó como «puente» en un río cercano hasta hace unas décadas. Se dice que unos aldeanos lo encontraron en la orilla del río y lo usaron como puente por conveniencia, hasta que alguien se dio cuenta de la particularidad de los grabados y, pensando «esto no es una simple piedra», lo donó al jinja. Si hubiera permanecido abandonado, quizás habría desaparecido en las brumas de la historia.

Misterio 2: La teoría de que era parte de un kofun

Desde una perspectiva arqueológica, se cree que este Monumento de Jindai Moji y la «Piedra de la Fuerza» (Chikaraishi) que se encuentra a su lado son cámaras de piedra (sarcófagos o losas de techo) reutilizadas de kofun (antiguos túmulos funerarios) cercanos.

La ciudad de Takashima es una tierra asociada con el Emperador Keitai, y es un área salpicada de gigantescos kofun. Existe también una teoría más práctica que sugiere que los patrones grabados en la piedra no son realmente letras, sino «decoraciones» específicas del período Kofun, o marcas hechas al cortar la piedra. Sin embargo, el motivo por el cual tienen formas tan complejas sigue siendo un misterio.

Leyenda: La Piedra de la Fuerza de la «chica superdotada» que detuvo una disputa por el agua

Al lado del Monumento de Jindai Moji, hay otra piedra llamada «Chikaraishi» (o «Mizuguchi-ishi», piedra de la entrada de agua). Aquí se conserva la leyenda de una joven que salvó al pueblo.

Se cuenta que, hace mucho tiempo, durante una feroz disputa por el agua en esta región, una joven aldeana de fuerza sobrehumana levantó con facilidad esta enorme piedra y la colocó en la mizuguchi (entrada de agua) de un arrozal, deteniendo el flujo. La inmensa fuerza de la joven hizo que las personas que luchaban perdieran su voluntad de combatir, y la disputa por el agua llegó a su fin.

Esta piedra también tiene una forma plana, similar a la mampostería de los kofun, y junto al Monumento de Jindai Moji, irradia un aura misteriosa en el jinja.

Un lugar para sentir el linaje del Emperador Keitai

El Emperador Ankan, consagrado en el Ankan jinja, es también una figura simbólica que protege el linaje, dada la dramática historia de su padre, el Emperador Keitai, quien «fue invitado desde las provincias (Echizen y Omi) para ascender al trono».

En las cercanías, se encuentran dispersos lugares que evocan el romance de la antigüedad, como el «Enazuka», donde se dice que fue enterrado el cordón umbilical del Emperador Keitai, y la gigantesca pagoda de piedra «Tsuruzuka».

Puntos clave para la visita

El Ankan jinja se encuentra en un lugar muy tranquilo, y precisamente porque no es un punto turístico, se puede experimentar un «misterio sereno» único.

Al observar atentamente el Monumento de Jindai Moji, la imaginación se desborda y uno no puede dejar de preguntarse si es escritura, un mapa o quizás un código QR antiguo (¡!).

Si están de visita en el lago Biwa y desean explorar las «capas más profundas de Japón» que no se encuentran en los libros de texto, ¿por qué no se animan a visitar este lugar?

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